Diversión y aventura a lo grande en el mes del niño

Piscinas y juegos acuáticos

 

Contamos con cuatro piscinas al aire libre. Una de ellas —la favorita de muchos— tiene un gran tobogán del que se deslizan niños y adultos. Otra muy concurrida es la que ofrece emocionantes juegos acuáticos, como resbaladeras, torres, chorros de agua y la atracción principal: un enorme balde que se llena poco a poco hasta volcarse, empapando a todos y generando momentos de risas y diversión. Para los más pequeños, además, tenemos una “patera”, una piscina poco profunda donde pueden nadar y refrescarse con total seguridad.

 

Diversión que premia

 

El equipo de animación del hotel organiza, a lo largo del día, diversas actividades participativas como visitas al huerto o clases de cajón, juegos como tiro con arco o ludo loco, además de retos, competencias y mini-espectáculos familiares. En ellas, tanto niños como adultos tienen la oportunidad de ganar “billetes Dunas” y participar en emocionantes  subastas de premios especiales y souvenirs para llevarse un pedacito de Las Dunas a casa. Una experiencia divertida y muy conectada al espíritu familiar del hotel. 

 

Deportes en familia

 

Contamos con amplias canchas de fútbol, vóley, básquet y tenis, donde las familias pueden jugar y compartir momentos de sana competencia junto a los nuevos amigos que suelen hacer en el hotel. Además, nuestro equipo de animación organiza campeonatos de fútbol tenis y creativas versiones de distintos deportes, como “básquet cucharita” o “básquet equilibrio”, que siempre sorprenden y divierten a todos. 

 

El castillo donde reina la imaginación

 

Nuestro Dunas Castle Kids, el lugar favorito de los más pequeños, es un castillo pensado para jugar y dejar volar la imaginación. Cuenta con una piscina de pelotas y un espacio de juegos con muñecos, peluches y juguetes sensoriales. Es el lugar ideal para que los más pequeños se diviertan, mientras los adultos descansan y disfrutan del entorno natural que rodea el castillo.

 

Aventura en el desierto

 

Desde el hotel se puede subir a una duna y disfrutar de una vista única del desierto de Ica, especialmente durante el atardecer, cuando el sol tiñe de naranja el cielo. Además de contemplar el paisaje, este espacio permite practicar sandboard, un deporte de aventura que combina la emoción con el contacto directo con la naturaleza. Sin duda, es una de las experiencias más memorables para los niños y las familias que visitan el hotel.

 

Paseos en medio de la naturaleza

 

Durante el día, las familias pueden recorrer el hotel en bicicleta o a caballo, mientras disfrutan de la flora y fauna de nuestro oasis en el desierto. A lo largo del camino se pueden apreciar buganvilias, árboles centenarios y, en los jardines, la compañía de hermosos caballos y elegantes pavos reales que cautivan tanto a niños como a adultos con su belleza natural.

 

En el Hotel Las Dunas, cada día se vive entre juegos, naturaleza y aventuras en pleno corazón del desierto, creando recuerdos que perduran para siempre. Ven a disfrutar de esta experiencia única y celebra el mes del niño con nosotros. 

 

Reserva tu estadía y ¡vive la magia de Las Dunas a lo grande!